Lo
primero que les digo, es que para mi, es el gimnasio de la risa, donde:
*
se enseña a reír sin necesidad de chistes ni de humor
* aprendes a mirar a los ojos a la gente y a encontrarte confortable en ese compartir
*
trabajando en grupo, nos apoyamos y nutrimos a través de la mirada directa a
los ojos
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desde el primer momento se genera un espacio para ser uno/a mismo/a
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recobras la libertad de jugar y reír sin condiciones
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tu creatividad se magnifica
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el ejercicio se vuelve disfrute
* el cuerpo libera las emociones que estaban ya listas para salir
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te muestras sencilla/o, humilde, sincera/o, espontánea/o
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tu hemisferio derecho trabaja de una manera intensa para ayudarte a todos los
niveles en tu vida personal, familiar y laboral
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cuidas de tu salud disfrutando
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conoces gente sin máscaras ni títulos
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en esos momentos sólo eres tú y disfrutas del momento presente, un auténtico
momento mindfulness
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te masajeas tu mismo todo el cuerpo
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te amas como nunca antes lo hiciste, porque tu mismo/a te lo puedes dar
*
renuevas totalmente en cada exhalación el dióxido de carbono
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te mantienes primero joven y poco a poco rejuveneces, es un excelente elixir de
la juventud
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sabes que eres capaz de hacer cualquier cosa que te lo propongas mientras
sientas la alegría y la pasión de lo que te mueve para vivir
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el tiempo es inexistente y siempre quieres más porque te sientes feliz
* te conectas con el cielo y la tierra y trabajas tu canal central, o sea, los chakras
*
conoces a personas adultas cuya expresión te muestra sus sueños y toda su
belleza
*................
Seguiría
y seguiría desarrollando todo lo que la risa me da, cada vez que doy una clase,
de lo que veo y me cuentan los alumnos/as.
Ya
son más de 500 personas con las cuales he compartido:
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ojos llenos de alegría,
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bocas abiertas de par en par, riendo lo que hacia años que habían dejado de hacer,
*
cuerpos que en un primer momento estaban llenos de dolor y luego se movían
ágiles,
*
mentes llenas de vergüenzas y limitaciones que luego han mostrado su
extraordinarias ganas de disfrutar,
*
cuerpos llenos de agujetas de movilizar los 400 músculos de la risa, que me
decían que se les ha hecho corto,
*
lágrimas de satisfacción por las emociones encontradas y liberadas,
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toses y arcadas, que gracias a la Risa, liberaban palabras y emociones retenidas,
* han encontrado una nueva forma de despertarse cada mañana,
* han tenido contactos con personas comprometidas con su desarrollo personal y el de los
demás y han llevado lo vivido a su vida cotidiana y lo han compartido,
*
la climatología del invierno con temperaturas fresquitas y lluvia alrededor,
donde hemos descubierto que al igual que cuando eramos pequeños, las
limitaciones nos las ponemos nosotros,
*
sentimientos de gratitud por sensaciones olvidadas y enterradas,
*
hermosos y nutritivos abrazos llenos de gratitud que nuestros cuerpos siguen a
fecha de hoy sintiendo en lo más profundo de nuestra composición como ser
humano emocional,
*
una gratitud inmensa por ambas partes por la entrega, la complicidad, el
compartir, la apertura, la empatía, la ayuda, ....... en todo lo vivido que
siempre llevo en mi corazón
.............................................
y que todo ello comienza con las manos en el pecho (símbolo del Namaste) en
sentido de armonía y respeto hacia las personas que van a trabajar todas juntas
en armonía para un bien común, ya que el proceso además de para las personas
que están allí presentes, también energéticamente les llega al entorno y a
aquellas personas con las que posteriormente van a tener posterior contacto y a
quienes vamos a evocar en la meditación para potenciar el trabajo de sanación.
Se trabaja de fondo energéticamente a los asistentes.
El
proceso que iniciamos con el saludo del Namaste, es seguido de unos
estiramientos donde lo primero que buscamos es crear una cohesión de grupo,
donde todo los ejercicios que hacemos de risa, de estiramientos, de relajación,
de P.N.L., sean siempre nutritivos.
Por
medio, iremos sintiendo como el cuerpo puede empezar a sentir como el trabajo
con la risa le cansa o le salen dolores de mandíbula, de sienes, de tripa y eso
pasa rápido con ejercicios de respiraciones muy lúdicas, donde las hormonas de
la felicidad apoyan nuestra entrega al trabajo que realizamos.
Esta
parte se termina después de estar cerca de 35 minutos donde la música que suena
al fondo son risas y risas.
Seguidamente viene la meditación de la Risa donde durante 10 minutos estamos riendo y riendo, en ese momento las nacionalidades, creencias, razas, sexo, estatus sociales,... dejan de existir ya que la risa nos alimenta para conectarnos con quienes verdaderamente somos: seres humanos que desean convivir en paz, amor y alegría con la naturaleza y los demás seres humanos.
He
tenido la gran fortuna de escuchar risas de Perú, de Argentina, de Venezuela,
de Colombia, de Ecuador, de México, de Cuba, de EE.UU, de Francia, de Italia,
de Rusia, de Finlandia, de Inglaterra, de Irlanda, de Sudáfrica, de España, de...... y sabéis que he
descubierto; todas dicen lo mismo: PAZ.
Una
vez creado ese vínculo, pasamos a la relajación, donde
integramos todo lo vivido en la clase a través de la Risa.
La
relajación es una sanación de vuestras emociones, de vuestros recuerdos, de lo
que lleváis siempre con vosotros, donde la toma de contacto se hace con alegría
y amor. Así comenzamos a sanar con la ayuda del trabajo hecho en clase y el
trabajo energético. Que empieza a realizarse, desde el momento en el que decidisteis
que os guiase en esa clase para conectar con aquello que ya esta preparado en
vuestras vidas para ser reconocido, sanado y liberado se de con la energía del
amor y la alegría.
El mensaje que lanzamos es:
"Te
espero cuando miremos el cielo de noche, tu allá y yo aquí. Que ambos sonriamos
al recordar las risas que hemos vivido en el día de hoy y que sabiendo lo que
esto nos da en la vida a cada uno/a, lo compartamos con los demás.
Al
hacerlo esa distancia kilométrica que hay entre los dos desaparece, porque
empezamos a agradecer todo lo vivido y a quienes hemos conocido para llegar a
conocernos".
Reconocemos
y agradecemos:
*
todo lo vivido,
*
todo lo que tenemos,
*
todo lo aprendido,
*
a quienes lo han hecho posible,
*
a quienes nos han guiado,
*
a quienes nos han puesto pruebas duras en la vida,
*
a quienes nos han amado,
* todo
lo que hemos sentido,
*
todo lo que hemos sanado,
*
..........."
Como
digo siempre al terminar las clases, agradezco en el alma todo lo vivido,
aprendido, compartido desde vuestra experiencia en seguir ayudándome a nutrir
mi proceso de vida. Donde enseñar desde el corazón lleno de alegría y sabiendo
que la tristeza, el miedo, la rabia, el orgullo, el amor y la alegría que
conozco y que me mostráis, me ayuda a saber:
*
darte la mano de una forma cálida,
*
conectar con la mirada sin miedo,
*
guiarte con dulzura en el proceso,
*
reírme con todo mi amor para que abras tu corazón y liberes lo que ya puedes
soltar,
*
a que escuchéis lo que en ese momento necesitarais para soltar y nutriros
*
la complicidad que me mostráis para entrar en una nueva etapa de la clase
*
como ya estáis dando pasos solos y creáis nuevas capas de amor y alegría dentro
de los ejercicios que os propongo
*
que os estoy agradecida por ser tan valientes, generosos/as y amorosos/as en un
trabajo que da tanto a quien lo da como a quien lo recibe.
Y
así, una vez terminada la meditación nutriéndonos con nuestras palabras,
pensamientos y acciones hacia nuestro cuerpo y mente que repercuten en los
demás, vamos moviendo lentamente el cuerpo y abriendo los ojos para recordar
que estamos aquí en la
Tierra por
un motivo, y que todo lo que somos y la forma que tenemos de hacerlo, sólo
nosotros podemos llegar a hacerlo.
Cada
clase que imparto son diferentes depende mucho de los asistentes y de lo que
vea, ya que gracias a mis 4 años de estudio teatral en improvisación y juego me han dado la oportunidad de leer cuerpos y expresiones para favorecer la integración del trabajo realizado. Al preguntar el estado de salud de cada uno:
Si
has tenido una operación reciente (hace menos de 3 meses) o si eres mujer,
si
estas embarazada de menos de 3 meses,
si existe algún problema de salud.
Me aseguro de que todos tengan las mismas posibilidades de hacer los ejercicios.
Y
es que la condición física hay que tenerla en cuenta para poder guiar bien una
sesión y hacer el trabajo más efectivo.
Infórmate de como te puedo guiar con:
* Clases semanales en sala
* Formación de Líder/Instructor de Yoga de la Risa
* Sesiones de Coach de la Risa personalizadas
* Sesiones individuales, donde trabajo la consciencia corporal a través de la risa, el masaje y la canalización de energía
* Talleres de Risoterapia o Yoga de la Risa para eventos privados o públicos. Donde aprendemos a través del juego desde el adulto que somos y donde los valores son más importantes que ganar o perder
